miércoles, 1 de octubre de 2014

LAS QUINCE PROMESAS DE LA VIRGEN MARÍA A QUIENES RECEN EL ROSARIO



LAS QUINCE PROMESAS
DE LA VIRGEN MARÍA
A QUIENES RECEN EL ROSARIO
 


Tras “entregar” las quince promesas, la Virgen se despidió pidiéndo un gesto de obediencia: «Predica cuanto has visto y oído. Y no temas, porque yo estaré siempre contigo y con todos los devotos de mi Rosario. 

1.- El que me sirva, rezando diariamente mi Rosario, recibirá cualquier gracia que me pida.

2.- Prometo mi especialísima protección y grandes beneficios a los que devotamente recen mi Rosario.
3.- El Rosario será un fortísimo escudo de defensa contra el infierno, destruirá los vicios, librará de los pecados y exterminará las herejías.
4.- El Rosario hará germinar las virtudes y también hará que sus devotos obtengan la misericordia divina; sustituirá en el corazón de los hombres el amor del mundo al amor por Dios y los elevará a desear las cosas celestiales y eternas. ¡Cuántas almas por este medio se santificarán!.
5.- El alma que se encomiende por el Rosario no perecerá.
6.- El que con devoción rezare mi Rosario, considerando misterios, no se verá oprimido por la desgracia, ni morirá muerte desgraciada; se convertirá, si es pecador; perseverará en la gracias, si es justo, y en todo caso será admitido a la vida eterna.
7.- Los verdaderos devotos de mi Rosario no morirán sin auxilios de la Iglesia.
8.- Quiero que todos los devotos de mi Rosario tenga en vida y en muerte la luz y la plenitud de la gracia, y sean partícipes de los méritos de los bienaventurados.
9.- Libraré pronto del purgatorio a las almas devotas del Rosario.
10.- Los hijos verdaderos de mi Rosario gozarán en el cielo una gloria singular.
11.- Todo lo que se me pidiere por medio del Rosario se alcanzará prontamente.
12.- Socorreré en todas sus necesidades a los que propaguen mi Rosario.
13.- Todos los que recen el Rosario tendrán por hermanos en la vida y en la muerte a los bienaventurados del cielo.
14.- Los que rezan mi Rosario son todos hijos míos muy amados y hermanos de mi Unigénito Jesús.
15.- La devoción al santo Rosario es una señal manifiesta de predestinación a la gloria.

OCTUBRE MES DEL SANTO ROSARIO


OCTUBRE MES DEL SANTO ROSARIO


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El que me honre diariamente rezando mi Rosario:


- Recibirá cualquier gracia que me pida. Le socorrerè en todas sus necesidades.- Tendrá mi especial protección y beneficios.- Se le quitaran sus vicios y germinarán sus virtudes.- No se verá oprimido por la desgracia, ni morirá de muerte desgraciada. Se convertirá si es pecador, perseverará en la gracia si es justo.- No morirá sin los auxilios de la Iglesia.- Le libraré pronto del purgatorio.- Obtendrá la misericordia de Dios.- Será admitido en la vida eterna.

Tratemos de rezar el Rosario en familia o con amigos por lo menos una vez a la semana.
Ofrece cada misterio por algo en particular.
¨ LA FAMILIA QUE REZA UNIDA, PERMANECE UNIDA¨.

MODO DE REZARLO 
1. Hacer el signo de la cruz y rezar el símbolo de     los apóstoles o el acto de contrición
2. Rezar el Padrenuestro
3. Rezar 3 Avemarías y Gloria.
4. Anunciar el primer misterio. Rezar el Padrenuestro.      
5. Rezar 10 Avemarías, Gloria y Jaculatoria.
6. Anunciar el segundo misterio. Rezar el Padrenuestro.
7. Rezar 10 Avemarías, Gloria y Jaculatoria.
8. Anunciar el tercer misterio. Rezar el Padrenuestro.
9. Rezar 10 Avemarías, Gloria y Jaculatoria.
10. Anunciar el cuarto misterio. Rezar el Padrenuestro.
11. Rezar 10 Avemarías, Gloria y Jaculatoria.
12. Anunciar el quinto misterio. Rezar el Padrenuestro.
13. Rezar 10 Avemarías, Gloria y Jaculatoria.
14. Rezar la Salve. 


[Santo Rosario]


ORACIONES DEL ROSARIO 

SEÑAL DE LA CRUZ
+Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor, Dios nuestro. 
+En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

SÍMBOLO DE LOS APÓSTOLES

Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

ACTO DE CONTRICIÓN
Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser vos quien sois, bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amén.


PADRENUESTRO
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.


AVEMARÍA
Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.


GLORIA
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén.


JACULATORIAS

Puede usarse una de estas dos:
  • María, Madre de gracia, Madre de misericordia, defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
  • Oh Jesús, perdónanos nuestros pecados, sálvanos del fuego del infierno y guía todas las almas al Cielo, especialmente aquellas que necesitan más de tu misericordia. (Oración de Fátima).


    SALVE
    Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos, gimiendo y llorando, en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen María!

    Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.
    Oración. Omnipotente y sempiterno Dios, que con la cooperación del Espíritu Santo, preparaste el cuerpo y el alma de la gloriosa Virgen y Madre María para que fuese merecedora de ser digna morada de tu Hijo; concédenos que, pues celebramos con alegría su conmemoración, por su piadosa intercesión seamos liberados de los males presentes y de la muerte eterna. Por el mismo Cristo nuestro Señor. Amén.

     MISTERIOS DEL ROSARIO 


    MISTERIOS GOZOSOS 
    (lunes y sábado)

    1. La Encarnación del Hijo de Dios.
    2. La Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel.
    3. El Nacimiento del Hijo de Dios.
    4. La Purificación de la Virgen Santísima.
    5. La Pérdida del Niño Jesús y su hallazgo en el templo.


    MISTERIOS DOLOROSOS 

    (martes y viernes)

    1. La Oración de Nuestro Señor en el Huerto.
    2. La Flagelación del Señor.
    3. La Coronación de espinas.
    4. El Camino del Monte Calvario.
    5. La Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor.
    MISTERIOS GLORIOSOS 
    (miércoles y domingo)

    1. La Resurrección del Señor.
    2. La Ascensión del Señor.
    3. La Venida del Espíritu Santo.
    4. La Asunción de Nuestra Señora a los Cielos.
    5. La Coronación de la Santísima Virgen.


    MISTERIOS LUMINOSOS 

    (jueves) 

    1. El Bautismo de Jesús en el Jordán.
    2. La Autorrevelación de Jesús en las bodas de Caná.
    3. El anuncio del Reino de Dios invitando a la conversión.
    4. La Transfiguración.
    5. La institución de la Eucaristía.


    1. Nuevos misterios propuestos por Juan Pablo II a la contemplación de los creyentes en la Carta Apostólica "Rosarium Virginis Mariae" (16-10-2002.) Se llaman misterios de luz o misterios luminosos porque en su vida pública Cristo se manifiesta como misterio de luz: "Mientras estoy en el mundo, soy luz del mundo" (Jn 9, 5). Estos nuevos misterios se rezan el jueves, pasando la segunda contemplación de los misterios gozosos al sábado.

    domingo, 28 de septiembre de 2014

    LECTURAS DE HOY DOMINGO


    LECTURAS DE HOY DOMINGO



    Primera lectura
    Lectura de la profecía de Ezequiel (18,25-28):

    Así dice el Señor: «Comentáis: "No es justo el proceder del Señor". Escuchad, casa de Israel: ¿es injusto mi proceder?, ¿o no es vuestro proceder el que es injusto? Cuando el justo se aparta de su justicia, comete la maldad y muere, muere por la maldad que cometió. Y cuando el malvado se convierte de la maldad que hizo y practica el derecho y la justicia, él mismo salva su vida. Si recapacita y se convierte de los delitos cometidos, ciertamente vivirá y no morirá.»

    Palabra de Dios


    Salmo
    Sal 24,4bc-5.6-7.8-9

    R/. Recuerda, Señor, que tu misericordia es eterna

    Señor, enséñame tus caminos, 
    instrúyeme en tus sendas: 
    haz que camine con lealtad; 
    enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador, 
    y todo el día te estoy esperando. R/.

    Recuerda, Señor, 
    que tu ternura y tu misericordia son eternas; 
    no te acuerdes de los pecados 
    ni de las maldades de mi juventud; 
    acuérdate de mí con misericordia, 
    por tu bondad, Señor. R/.

    El Señor es bueno y es recto, 
    y enseña el camino a los pecadores; 
    hace caminar a los humildes con rectitud, 

    enseña su camino a los humildes. R/.


    Segunda lectura
    Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses (2,1-11):

    Si queréis darme el consuelo de Cristo y aliviarme con vuestro amor, si nos une el mismo Espíritu y tenéis entrañas compasivas, dadme esta gran alegría: manteneos unánimes y concordes con un mismo amor y un mismo sentir. No obréis por rivalidad ni por ostentación, dejaos guiar por la humildad y considerad siempre superiores a los demás. No os encerréis en vuestros intereses, sino buscad todos el interés de los demás. Tened entre vosotros los sentimientos propios de Cristo Jesús. Él, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el Nombre-sobre-todo-nombre; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.

    Palabra de Dios


    Evangelio de hoy

    Lectura del santo evangelio según san Mateo (21,28-32):




    En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «¿Qué os parece? Un hombre tenía dos hijos. Se acercó al primero y le dijo: "Hijo, ve hoy a trabajar en la viña." Él le contestó: "No quiero." Pero después recapacitó y fue. Se acercó al segundo y le dijo lo mismo. Él le contestó: "Voy, señor." Pero no fue. ¿Quién de los dos hizo lo que quería el padre?» 
    Contestaron: «El primero.» 
    Jesús les dijo: «Os aseguro que los publicanos y las prostitutas os llevan la delantera en el camino del reino de Dios. Porque vino Juan a vosotros enseñándoos el camino de la justicia, y no le creísteis; en cambio, los publicanos y prostitutas le creyeron. Y, aun después de ver esto, vosotros no recapacitasteis ni le creísteis.»


    Palabra del Señor