jueves, 20 de agosto de 2015

ORACIÓN PARA PADRE DESCONSOLADOS

ORACIÓN PARA PADRE DESCONSOLADOS

Oración específica para padres desconsolados que pueden recitar por sí mismos o que otros pueden usar para orar porque han perdido a sus hijos:
 "Dios, tú que sacrificaste a tu hijo para que nosotros y nuestros hijos podamos trascender la muerte física. Sabemos que sufriste cuando fue crucificado y que sientes dolor por todas las atrocidades hechas por los hombres especialmente en tu nombre. Tú conoces y comprendes el dolor como sabes y conoces todo a nuestro alrededor. Tú sabes mejor que nadie cómo consolar a los padres. Levanta sus corazones a ti y llénalos con tu paz. Tu comprensión va más allá de nuestra comprensión humana, pero dales el conocimiento y la fe para soportar aun lo que no pueden entender. Déjales ser conscientes de que tu eres siempre Dios, y ayúdales a recordar que tu amor es vida que nunca puede ser realmente quitada".

LECTURAS Y EVANGELIO DEL DIA

                                                  Lecturas y Evangelio del Día

Lectura Misa del Día  miércoles, 19 de agosto de 2015
Lectura del libro de los Jueces 11, 29-39a
El primero que salga de mi casa a recibirme, será para el Señor, y lo ofreceré en holocausto 


En aquellos días, el espíritu del Señor vino sobre Jefté, que atravesó Galaad y Manasés, pasó a Atalaya de Galaad, de allí marchó contra los amonitas, e hizo un voto al Señor:
-«Si entregas a los amonitas en mi poder, el primero que salga a recibirme a la puerta de mi casa, cuando vuelva victorioso de la campaña contra los -amonitas, será para el Señor, y lo ofreceré en holocausto.»Luego marchó a la guerra contra los amonitas. El Señor se los entregó; los derrotó desde Aroer hasta la entrada de Minit (veinte pueblos) y hasta Pradoviñas. Fue una gran derrota, y los amonitas quedaron sujetos a Israel.
Jefté volvió a su casa de Atalaya. Y fue precisamente su hija quien salió a recibirlo, con panderos y danzas; su hija única, pues Jefté no tenía más hijos o hijas.En cuanto la vio, se rasgó la túnica, gritando:-« ¡Ay, hija mía, qué desdichado soy! Tú eres mi desdicha, porque hice una promesa al Señor y no puedo volverme atrás.»Ella le dijo:-«Padre, si hiciste una promesa al Señor, cumple lo que prometiste, ya que el Señor te ha permitido vengarte de tus enemigos.»Y le pidió a su padre:«Dame este permiso: déjame andar dos meses por los montes, llorando con mis amigas, porque quedaré virgen.»Su padre le dijo:-«Vete. »Y la dejó marchar dos meses, y anduvo con sus amigas por los montes, llorando porque iba a quedar virgen.Acabado el plazo de los dos meses, volvió a casa, y su padre cumplió con ella el voto que habla hecho.
Del Salmo
R. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor, y no acude a los idólatras, que se extravían con engaños. R.
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y, en cambio, me abriste el oído; no pides sacrificio expiatorio, entonces yo digo: «Aquí estoy.» R.
– Como está escrito en mi libro –«para hacer tu voluntad». Dios mío, lo quiero, 
y llevo tu ley en las entrañas. R

.He proclamado tu salvación ante la gran asamblea;no he cerrado los labios: Señor, tú lo sabes. R.
SANTO EVANGELIO

A todos los que encontréis convidadlos a la boda 

Lectura del santo evangelio según san Mateo 22, 1-14

En aquel tiempo, de nuevo tomó Jesús la palabra y habló en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:
«El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisaran a los convidados a la boda, pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados, encargándoles que les dijeran:“Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas, y todo está a punto. Venid a la boda.”Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios; los demás les echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos.El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados:“La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encontréis, convidadlos a la boda.”Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta y le dijo:“Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta?’El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los camareros:“Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.”Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos.»
REFLEXIÓN
Al leer la primera lectura nos encontramos con una historia que puede costar entenderla. Jefté sacrifica a su única hija al Señor como acción de gracias por la victoria conseguida frente a los amonitas. Cualquiera de nosotros reprobaría esa actitud. ¿Cómo es posible creer en un Dios tan cruel? ¿No es el mismo Dios que impidió el sacrificio de Abrahán? A diferencia de los dioses paganos, el Dios de Israel nunca aceptó los sacrificios humanos (Lv 18,21; Dt 12,31). Eso es lo que nos da una clave para entender el sacrificio de Jefté. Aún creyendo en Dios, no lo adora como el Dios de la vida. Al contrario, usurpa el lugar de Dios al decidir sobre la vida de su hija.
Jefté hace una promesa sin sentido cuando promete ofrecer en sacrificio a la perima persona que lo reciba a la puerta de su casa. No puedo menos que imaginar la dramática escena de la hija danzando y cantando porque su padre ha vuelto a casa con vida y al mismo tiempo viéndose sentenciada a muerte. ¡No se puede aceptar! La promesa de Jefté no es para gloria de Dios sino para su propia gloria. La prueba está en que Dios no dice nada ante la promesa de Jefté ni da su consentimiento. Entonces, ¿qué nos enseña este texto?
A lo largo de la historia, incluido la del cristianismo, muchos países han sido invadidos, muchos inocentes han sido asesinados, muchos pueblos han perdido sus tierras, siempre en nombre de Dios. Hoy vemos las barbaridades cometidas por el autodenominado Estado Islámico en nombre de Dios. También nosotros, cristianos, podemos cometer atrocidades en nombre de Dios cuando distorsionamos el contenido de la Buena Nueva.
Es preciso rechazar cualquier imagen de Dios que oprima o discrimine a las personas por la razón que sea. Si no lo hacemos así, estaremos también sacrificando a los hermanos en nombre de Dios. Por eso, el Evangelio de hoy nos dice que todos estamos invitados a la fiesta del reino, los malos y los buenos. Basta con que tengamos el traje de fiesta, es decir, que asumamos los valores del reino. 


miércoles, 19 de agosto de 2015

ORACIÓN POR LOS NIETOS

ORACIÓN POR LOS NIETOS

Dame, Señor, la cordura para poder hablar a mis nietos del amor que mi ser contiene.
Dame, la oportunidad de besar su frente por las noche y en cada amanecer.Quiero pedirte que des luz a mis ojos para disfrutar con ellos de sus sonrisas, de sus cambios de voz.Quiero que cuando ellos miren mi lento andar comprendan que la vida está hecha de pasos y de caídas, que todo es...aprender y llegar a amar.Es mi ilusión que al verme ellos de la mano de su abuelo/a , sepan que el amor nunca termina.Deseo que cuando me escuchen orar , con el pasar de los años entiendan que siempre deben recurrir a Tí , pues eres el camino, la verdad y la vida.Señor, te pido que les des valentía para soñar y ánimo para perseguir sus sueños, que nunca abandonen al niño que Tú le has colocado dentro.Te pido que tengan la capacidad de ver hacia adelante, de caminar sin atropellar a nadie, de abrir nuevas metas y nunca sentirse derrotados, de ser humildes ante toda tu Creación, respetuosos de lo que los rodee, amantes de los gestos del hermano, compasivo ante el dolor, generosos y magnánimos ante el caído . Amén

EN TI CONFIARE PARA LOS QUE ESTÁN PASANDO MOMENTOS DIFÍCILES



PARA LOS QUE ESTÁN PASANDO MOMENTOS DIFÍCILES

Si estas pasando por un momento difícil, donde pareciera que nada tiene solución, no pierdas la fe. Puedes confiar en Dios.
Jesús nos dijo que en el mundo tendríamos aflicción, pero que confiáramos en Él, pues Él ha vencido el mundo.Esta canción refrescara tu alma. Dios esta muy cerca de ti.

ORACIÓN PARA ANTES DEL EXAMEN DE CONCIENCIA

                                                       ORACIÓN PARA ANTES
                                                  DEL EXAMEN DE CONCIENCIA


Mirad, oh amado y buen Jesús, un pecador, postrado lleno de confianza a vuestros pies. Mis pecados me llenan de temor y no encuentro otro refugio que vuestro amantísimo Corazón. A la vista de ese divino Corazón, la confianza vuelve otra vez a mi alma. Soy, en verdad, oh Señor, el más ingrato de vuestros hijos, que tan mal ha correspondido a vuestro amor, ofendiéndoos a Vos, que sois mi Padre bondadosísimo. Ya no soy digno de ser llamado hijo vuestro. Pero mi pobre corazón no puede vivir sin Vos. Merezco un juez severo; pero en vez de esto, encuentro un Dios, lleno de ternura y amor, clavado en la cruz, por mi bien, y con los brazos abiertos, dispuesto a recibirme, cual Padre amoroso.
Vuestras cinco llagas son como otras tantas lenguas que me invitan al arrepentimiento y hablan a mi pobre corazón: vuélvete, hijo mío, vuélvete a Mi, arrepiéntete y no dudes de mi amor y de mi perdón.
Acabad, oh dulce Maestro la obra que en vuestra infinita caridad habéis comenzado. Concededme un poco de aquel conocimiento y de aquel dolor que Vos teníais de mis pecados, cuando en el huerto de los Olivos sudasteis sangre a la vista de ellos, y caísteis como muerto sobre vuestro sagrado rostro, para que yo comprenda el peso y la malicia del pecado y conciba un verdadero dolor. Iluminad mi entendimiento para que conozca claramente mis pecados. Fortaleced mi voluntad para aborrecer mis pecados y arrepentirme de todos ellos.
Oh María, Madre de los dolores, ayudadme en esta grande tribulación de mi alma.

Angel de mi guarda, Patronos míos, rogad por mí, para que haga una buena confesión. Así sea.

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO


        ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
   (Para ofrecer el día)

¡Oh Espíritu Santo!, alma de mi alma, te adoro; ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime que debo hacer, ordéname.
Concédeme someterme a todo lo que quieras de mí, y aceptar todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer y cumplir tu voluntad.

LECTURAS Y EVANGELIO DEL DIA

                                                   Lecturas y Evangelio del Día

Lectura Misa del Día  miércoles, 19 de agosto de 2015
 Lectura del libro de los Jueces (9,6-15):

En cuanto se enteró Yotán, fue y, en pie sobre la cumbre del monte Garizín, les gritó a voz en cuello: «¡Oídme, vecinos de Siquén, así Dios os escuche! Una vez fueron los árboles a elegirse rey, y dijeron al olivo: "Sé nuestro rey." Pero dijo el olivo: "¿Y voy a dejar mi aceite, con el que engordan dioses y hombres, para ir a mecerme sobre los árboles?" Entonces dijeron a la higuera: "Ven a ser nuestro rey." Pero dijo la higuera: ¿Y voy a dejar mi dulce fruto sabroso, para ir a mecerme sobre los árboles?" Entonces dijeron a la vid: "Ven a ser nuestro rey." Pero dijo la vid: "¿Y voy a dejar mi mosto, que alegra a dioses y hombres, para ir a mecerme sobre los árboles?" Entonces dijeron a la zarza: "Ven a ser nuestro rey." Y les dijo la zarza: "Si de veras queréis ungirme rey vuestro, venid a cobijaros bajo mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y devore a los cedros del Líbano."»

Del Salmo

¡y cuánto goza con tu victoria! 

R/. Señor, el rey se alegra por tu fuerza

Señor, el rey se alegra por tu fuerza,
¡y cuánto goza con tu victoria!
Le has concedido el deseo de su corazón,
no le has negado lo que pedían sus labios. R/.
Te adelantaste a bendecirlo con el éxito,
y has puesto en su cabeza una corona de oro fino.
Te pidió vida, y se la has concedido,
años que se prolongan sin término. R/.
Tu victoria ha engrandecido su fama,
lo has vestido de honor y majestad.
Le concedes bendiciones incesantes,
lo colmas de gozo en tu presencia. R/.

SANTO EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Mateo (20,1-16):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «El reino de los cielos se parece a un propietario que al amanecer salió a contratar jornaleros para su viña. Después de ajustarse con ellos en un denario por jornada, los mandó a la viña. Salió otra vez a media mañana, vio a otros que estaban en la plaza sin trabajo, y les dijo: "Id también vosotros a mi viña, y os pagaré lo debido." Ellos fueron. Salió de nuevo hacia mediodía y a media tarde e hizo lo mismo. Salió al caer la tarde y encontró a otros, parados, y les dijo: "¿Cómo es que estáis aquí el día entero sin trabajar?" Le respondieron: "Nadie nos ha contratado." Él les dijo: "Id también vosotros a mi viña." Cuando oscureció, el dueño de la viña dijo al capataz: "Llama a los jornaleros y págales el jornal, empezando por los últimos y acabando por los primeros." Vinieron los del atardecer y recibieron un denario cada uno. Cuando llegaron los primeros, pensaban que recibirían más, pero ellos también recibieron un denario cada uno. Entonces se pusieron a protestar contra el amo: "Estos últimos han trabajado sólo una hora, y los has tratado igual que a nosotros, que hemos aguantado el peso del día y el bochorno. Él replicó a uno de ellos: "Amigo, no te hago ninguna injusticia. ¿No nos ajustamos en un denario? Toma lo tuyo y vete. Quiero darle a este último igual que a ti. ¿Es que no tengo libertad para hacer lo que quiera en mis asuntos? ¿O vas a tener tú envidia porque yo soy bueno?" Así, los últimos serán los primeros y los primeros los últimos.»

REFLEXIÓN

Las dos lecturas de hoy nos ofrecen muchas enseñanzas para nuestra vida. Nos hablan sobre todo del sentido de justicia, de la generosidad y del trabajo. En la primera lectura escuchamos la fábula de los plantas, contada por Joatán para criticar el poder destructivo de los reyes. Sin pretender agotar todo el significado de la fábula, me parece interesante subrayar algunos detalles. Las tres primeras plantas, el olivo, la higuera y la vid, prefieren seguir produciendo sus frutos que alegran la vida de las personas antes que controlar, manipular y gobernar a las demás plantas. Es el espino, que no produce ningún fruto, el que acepta gobernar a los demás. Y lo único que ofrece a cambio es la destrucción. Hay una clara contraposición entre el servicio a los demás y el poder autoritario. ¿No es eso lo que sucede a los que buscan el poder a cualquier precio?
En el Evangelio Jesús cuenta una parábola un tanto desconcertante. El patrón paga a todos un denario, lo que en Galilea en aquel tiempo era lo suficiente para un día de una familia. Así se pone de manifiesto una concepción revolucionaria de la justicia de Dios que se opone a nuestra justicia calculadora. Mientras que nosotros creemos que ser justos es dar a cada uno lo suyo, para Jesús ser justo significa ser bueno. El dueño de la viña pagó un salario proporcional a las necesidades de los trabajadores y de sus familias, no al trabajo realizado. No se preocupaba tanto de los resultados del trabajo sino de que todos los trabajadores pudieran llevar lo suficiente a sus casas.
Las últimas palabras del Evangelio son la clave de todo el texto: Dios no se relaciona con sus hijos a partir del criterio del mérito acorde con el rendimiento sino a partir de su propia generosidad. No creo que Dios ande calculando lo que cada uno se merece. La parábola nos ayuda a superar esa imagen “deformada” de Dios, que se parecería más a un patrón que busca hacer las cuentas con sus empleados que a un padre que siempre desea lo mejor para sus hijos. El que pasa su vida calculando cuánto va a ganar y cuánto merece por las obras que hace no ha entendido lo que significa ser hijo de Dios, no ha entendido el Evangelio, no ha entendido lo que es seguir a Jesús.
En una sociedad como la nuestra en que se valora más la competitividad, los privilegios y la productividad, la Palabra de dios nos presenta una forma alternativa de vivir nuestras relaciones: el servicio desinteresado, la justicia que se fundamenta en la bondad y en la generosidad, el trabajo que busca por encima de todo el bien de las personas.  



martes, 18 de agosto de 2015

ROSARIO DE LA MILAGROSA EN FAVOR DE LAS ALMAS DEL PURGATORIO



ROSARIO DE LA  MILAGROSA
 EN FAVOR DE LAS ALMAS DEL PURGATORIO

PRIMER MISTERIO
Os suplicamos, Señor, saquéis tantas almas del purgatorio y convirtáis tantos pecadores, cuantas fueron las sensaciones de dolor que sufrió vuestro amantísimo corazón y el de vuestra Purísima Madre, en la noche de vuestra dolorosa Pasión y cruel agonía en el huerto de las Olivos.
Y vosotras, almas santas, alcanzadnos del Señor las gracias que deseamos conseguir por intercesión de la Santísima Virgen, saludándola diez veces con la jaculatoria. ¡Oh María! sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos.

SEGUNDO MISTERIO
Os suplicamos, Señor, saquéis tantas almas del purgatorio y convirtáis tantos pecadores, cuantas fueron las sensaciones de dolor que sufrió vuestro amantísimo corazón y el de vuestra Purísima Madre con el tormento de los crueles azotes que sufristeis amarrado a una columna.
Y vosotras, almas santas, alcanzadnos del Señor las gracias que deseamos conseguir por intercesión de la Santísima Virgen, saludándola diez veces con la jaculatoria. ¡Oh María! sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a vos.

TERCER MISTERIO
Os suplicamos, Señor, saquéis tantas almas del purgatorio y convirtáis tantos pecadores, cuantas fueron las sensaciones de dolor que sufrió Vuestro amantísimo Corazón y el de vuestra Purísima Madre con la cruel coronación de espinas, burlas y escarnios.
Y vosotras, almas santas, alcanzadnos del Señor las gracias que deseamos conseguir por intercesión de la Santísima Virgen, saludándola diez veces con la jaculatoria. ¡Oh María! sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos.


CUARTO MISTERIO
Os suplicamos, Señor, saquéis tantas almas del purgatorio y convirtáis tantos pecadores, cuantas fueron las sensaciones de dolor que sufrió vuestro amantísimo corazón y el de vuestra Purísima Madre en el encuentro de la calle de la Amargura caminando con pesada cruz de nuestros pecados.
Y vosotras, almas santas, alcanzadnos del Señor las gracias que deseamos conseguir por intercesión de la Santísima Virgen, saludándola diez veces con la jaculatoria. ¡Oh María! sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos.

QUINTO MISTERIO

Os suplicamos, Señor, saquéis tantas almas del purgatorio y convirtáis tantos pecadores, cuantas fueron las sensaciones de dolor que sufrió vuestro amantísimo corazón y el de vuestra Purísima Madre en las tres horas de mortal agonía y afrentosa muerte en la Cruz.
Y vosotras, almas santas, alcanzadnos del Señor las gracias que deseamos conseguir por intercesión de la Santísima Virgen, saludándola diez veces con la jaculatoria. ¡Oh María! sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos.
Se concluye el rosario rezando el Credo y la Salve.
Pedid con fe y recibiréis.

LECTURAS Y EVANGELIO DEL DIA

Lecturas y Evangelio del Día

Lectura Misa del Día Martes Agosto 18 2015

Luego el ángel del Señor acercó la punta del bastón que tenía en la mano y tocó la carne y los panes sin levadura. Salió fuego de la roca, consumió la carne y los panes, y el ángel del Señor desapareció.Y todo aquel que por mí haya dejado casa, o hermanos o hermanas, o padre o madre, o esposa o hijos, o propiedades, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna. Y muchos primeros serán últimos y muchos últimos, primeros".


Jueces: 6, 11-24
Gedeón, tú librarás a Israel: Yo soy el que te envía.
En aquellos días, vino el ángel del Señor y se sentó bajo la encina de Ofrá, que pertenecía a Joás, de la familia de Abiezer. Su hijo Gedeón estaba limpiando trigo en el lagar, para esconderlo de los madianitas, cuando el ángel del Señor se le apareció y le dijo: "El Señor está contigo, valiente guerrero".
Le contestó Gedeón: "Perdón, señor mío. Si el Señor está con nosotros, ¿por qué han caído sobre nosotros tantas desgracias? ¿Dónde están todos aquellos prodigios de los que nos hablaban nuestros padres cuando nos decían: `El Señor nos sacó de Egipto'? Ahora, en cambio, el Señor nos ha abandonado y nos ha entregado a los madianitas".
Entonces el Señor se volvió hacia Gedeón y le dijo: "Usa la fuerza que tienes, para ir a salvar a Israel del poder de los madianitas. Yo soy el que te envía". Le respondió Gedeón: "Perdón, Señor mío; pero, ¿cómo voy a salvar yo a Israel? Mi familia es la más pobre de la tribu de Manasés y yo, el más pequeño de la casa de mi padre". El Señor le respondió: "Yo estaré contigo y tú derrotarás a todos los madianitas como si fueran un solo hombre".
Gedeón le dijo: "Si he alcanzado tu favor, dame una señal de que eres tú el que me habla. No te vayas de aquí, por favor, hasta que vuelva con una ofrenda y te la presente". Él respondió: "Aquí me quedaré hasta que vuelvas".
Gedeón entró en su casa, preparó un cabrito, y con una medida de harina, hizo unos panes sin levadura; puso la carne en una canastilla y el caldo en una olla, lo llevó bajo la encina y se lo ofreció al ángel. Pero éste le dijo: "Toma la carne y los panes sin levadura, ponlos sobre esa roca y derrama encima el caldo". Gedeón lo hizo así.
Entonces se dio cuenta Gedeón de que era el ángel del Señor y exclamó: "¡Ay, Dios mío, he visto al ángel del Señor cara a cara!" Pero el Señor le dijo: "Que la paz sea contigo. No temas; no morirás". Gedeón levantó un altar al Señor en aquel lugar y lo llamó "La paz del Señor".
Del salmo 84
Escucharé las palabras del Señor.
Escucharé las palabras del Señor, palabras de paz para su pueblo santo y para los que se convierten de corazón. Está ya cerca nuestra salvación y la gloria del Señor habitará en la tierra. R/.
La misericordia y la verdad se encontraron, la justicia y la paz se besaron, la fidelidad brotó en la tierra y la justicia vino del cielo. R/.
Cuando el Señor nos muestre su bondad, nuestra tierra producirá su fruto. La justicia le abrirá camino al Señor e irá siguiendo sus pisadas. R/.
San Mateo: 19, 23-30
Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el Reino de los cielos.
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Yo les aseguro que un rico difícilmente entrará en el Reino de los cielos. Se lo repito: es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el Reino de los cielos".
Al oír esto, los discípulos se quedaron asombrados y exclamaron: "Entonces ¿quién podrá salvarse?" Pero Jesús, mirándolos fijamente, les respondió: "Para los hombres eso es imposible, más para Dios todo es posible".
Entonces Pedro, tomando la palabra, le dijo a Jesús: "Señor, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido, ¿qué nos va a tocar?" Jesús les dijo: "Yo les aseguro que en la vida nueva, cuando el Hijo del hombre se siente en su trono de gloria, ustedes, los que me han seguido, se sentarán también en doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel.
REFLEXIÓN 
En este pasaje del Evangelio, Jesús explica que el Padre desea que sus hijos lo amen por encima de todo, porque de esa forma le darán menos importancia a los bienes terrenales y al dinero.Quien se entregue de corazón a Cristo estará dispuesto a renunciar a todo obstáculo en su relación con el Señor. La acumulación de bienes, el prestigio social o la posición económica e incluso las amistades deben ser menos importantes que Dios. Ninguna de estas cosas puede salvarnos. En ciertas ocasiones, los bienes pueden ayudarnos a acercarnos a Dios, pero también pueden alejarnos de él con la misma facilidad. Todo depende de que el Señor sea lo más importante en nuestro corazón.
Los que dedican su vida a procurarse fortuna, aquellos de los que hablaba Jesús, son los prepotentes de este mundo, los que no confían en nadie sino en sí mismos; los que atribuyen más importancia a su posición social y sus bienes, su influencia y tal vez a la estima de los demás. Pero en el Sermón de la Montaña, Jesús dijo: “Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos” (Mateo 5, 3). El Padre quiere que todos sus hijos vivan en comunión con él; que reconozcan sus faltas y errores y le pidan perdón por medio de su Hijo Jesucristo; que admitan sus debilidades y su ignorancia y confíen en que sólo el Señor puede guiarlos y darles fortaleza.